Y si te pierdes a ti mismo, ¿puedes llevarme también?

viernes, 11 de marzo de 2011


En el camino hay veces que das un giro equivocado y tomas un sendero erróneo. Lo que nunca pensaste que podría pasarte, te sucede... pero avanzas. Avanzas con la esperanza que no sea un camino sin salida...



Muchas mas vendrán. Con todo el tiempo que pase, sabrás que eres uno más de muchos. Suele suceder que a veces nos aferramos a la creencia que no sólo somos uno del montón. No podemos "no" ser importantes... para alguien (¿?). Pero a lo largo, muchos van y vienen. Pero, al menos, uno debe ser para siempre. "A alguien debe (debo) importarle..." suelo escuchar decir muy disimuladamente. 

Aferremos la idea que no podemos ser invisibles. Que a alguien debe importarle... alguien, ¿o no?. No podemos ser tan "pasajeros". Esto proviene de una vieja extraña, una desconocida que por coincidencia solía venir de todo el pasado que tengo. Una vieja extraña suele decir a una extraña no tan extraña... que a veces las personas conspiran contra los propósitos de la vida. Por hacer drama. Por sentirse vivos. Por no tener otra vida más que una miserable. Pero sobre todo, por querer ser importantes. La vieja extraña le dijo a la extraña no tan extraña que el peor dolor para un ser humano era el no sentirse importante para alguien. Quien fuese, da lo mismo... pero que a alguien le importara si te duele algo, si tienes sueño, pena, alegría... lo que sea. Que el vivir sin ser nada para nadie consume la propia realidad. De tiempos antiguos, la vieja extraña (muy vieja para esta vida) fue un fantasma en la vida. Y nunca le importo a nadie. La vieja extraña nunca fue importante pero tampoco le importo, porque nunca conoció esa sensación. Esa vibración que te tiemblan las piernas, que se te seca la garganta y las palabras se atoran. "Eres lo más importante que tengo en la vida".

Podemos pasar años haciendo de todo. Podemos pasar años queriendo ser aceptados, queridos, apreciados, serviciales, empaticos... pero al día de mañana, seguirás no siendo importante para nadie. Lamentablemente, aunque algunos digan que no necesitan a nadie, debo informarles... como para que nunca lo olviden... todos necesitamos a alguien. Todos necesitamos a alguien a quien de verdad le importe si respiras. Si vivirás el mañana.

Cualquier persona. Cualquier tipo de relación. Cualquier duración. Cualquier intensidad. Sólo... nunca olviden que siempre necesitamos a alguien que no se olvide de uno. Porque... ¿cuál sería el sentido de la vida... si este fuese que estuviésemos solos?. La soledad nunca es buena compañía para quien quiere vivir un mañana, un amanecer más, un atardecer, un respiro más.



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